Las 10 lecciones que nos han enseñado los diseñadores en 2022

Necesitaba pararme a escribir. Barrunto mil ideas en la mente pero vivo en un sin parar entre mi trabajo y mi vida en general, bien lo veis quienes me seguís por instagram.

Tengo varios posts en “la cocina” sobre tendencias de moda flamenca pero he recordado que el de las mejores colecciones de flamenca de este 2022 aún no os lo había escrito. Y me apetece hacerlo pero desde otra perspectiva.

Hoy vamos a hablar de esas 10 grandes colecciones de flamenca de este 2022 pero sobretodo de esas 10 lecciones en moda flamenca que nos han dado con cada una de ellas y de las que deberíamos aprender.

1. El clasicismo de Lina.

Nunca se puede decir que esté “todo hecho” como afirmación única y exclusiva en moda. Pero que bien sienta cuando una firma como Lina se dedica a recordarnos que las flamencas también son clásicas, con sus volantes, sus bodoques, mantoncillos y trajes “de siempre“, que por momentos veo que estamos un poco desabastecidos de la esencia y elegancia de Grace Kelly en el Real de la Feria de Abril.

Y sus trajes tienen ese “no sé qué” que no son simplemente un vestido de tres volantes. Andan de otra forma, tienen otro empaque que nos hace recordar tiempos pasados.

2. Qué significa hacer Moda Flamenca por José Hidalgo.

Cibeles. Nos ha enseñado que la moda flamenca es digna, como mínimo, de Cibeles en el sentido de que hacer este tipo de moda no es pegar dos volantes en una manga y utilizar tres lunares. Es crear moda, que se sienta con estilo y con un fondo racial y andaluz.

Es agitar la coctelera de ideas y entre los diseños, tener claro el estilismo, la puesta en escena y tener un gusto tan impecable que no quepan dudas de que la moda flamenca es ese algo más . ‘Pim, pam, pum…’ vestirse de José Hidalgo y sentirte mujer con estilo.

3. Encontrar tu sello por Mónica Méndez.

Ella es la diseñadora callada, tímida que va a lo suyo, trabaja y se dedica a seguir cultivándose y formándose día tras día.

Su evolución la hemos ido viendo año tras año. Ha fijado su estilo haciendo de las mangas y voluminosos hombros con volantes su gran potencial. El punto con volantes dibujando el cuerpo son una maravilla para todas aquellas mujeres que quieren abandonar los volúmenes. Y sin embargo, algo que a veces pasa desapercibido a la hora de identificar a Mónica con un estilo es que en todas sus colecciones de moda flamenca aparecen lunares de galleta. ¿Os habíais fijado?

4. La pureza es la justa medida por Ventura.

No han sido años fáciles para nadie. Pero Ventura nos ha demostrado con su colección de flamenca que a veces, en lo puro, flamenco y sencillo con toques especiales está la medida justa.

Nada que añadir a todo lo que ya hemos dicho. Un patronaje y costura exquisito y una flamenca con la que sentirse identificada, racial y con un punto moderno basado en estilismos y cortes.

5. La exquisitez de Juan Manolo.

Ha llegado y ya nos ha demostrado que quiere hacerse con un “hueco” en el estilo que nos había dejado huérfanos con la ausencia de Cristina García y Luis Fernández.

Tiene un gusto para elegir tejidos y colores que, junto a los diseños y estilismos, crea una flamenca sosegada y amante de la moda. La sofisticación marca cada uno de sus trajes de flamenca y tiene claro cuál va a ser su desarrollo, esperemos que el tiempo lo deje hacer y consiga todas sus metas.

6. El leimotiv es algo más por Verónica Cerezo.

Ojo que no es fácil. Que el leimotiv no te haga “disfrazar” a las flamencas y que los diseños estén también impregnados de dicha inspiración sin dejar de ser flamencos, lleva un trabajo por detrás impresionante.

No se trata de “poner un sombrero aquí y ya está” en un traje cualquiera. Ni se trata de hacer 40 trajes de flamenca que uno no sabe bien que son. Se trata de una conjunción entre el diseño, la flamenca y el leimotiv y Verónica Cerezo nos ha enseñado que, si se le pone empeño y se trabaja, sale bien.

¿Que a veces se elige un tema difícil y conseguirlo o adaptar el traje, los diseños o los tejidos es complicado? Sí, pero el carnet de diseñador no se regala a la vuelta de la esquina y para eso están las mentes creativas. Y si no, no te lies, elige otro.

7. La lección magistral de El Ajolí.

Cuarenta años dan para hablar de moda flamenca con propiedad. La pena es que algunos no la entiendan ni pretendan hacerlo.

La transición evolutiva de la moda flamenca y, en concreto, en la firma de El Ajolí vista traje a traje fue todo un gusto para los sentidos y, sobretodo, el recuerdo de que antes los trajes estaban mucho más costeados por el uso de encajes, cintas, plisados, etc.

Hay que tenerlo muy claro para enfrentarse, ojo, no con recreaciones sino con trajes antiguos guardados en el baúl de los recuerdos o de clientas a una pasarela donde todo lo que vemos son tendencias y trajes nuevos.

Y después de su desfile examen a los diseñadores nuevos… y a más de uno que anda por ahí dando lecciones.

8. Cómo hacer pasarela por José Raposo.

Ya lo expliqué en el post resumen de la jornada en la que desfiló en Simof. Lo suyo es otra cosa.

Si quieres ver trajes sencillos y un estilismo recatado no vayas a sus desfiles. Una cosa siempre será lo que venda de puertas para adentro en su taller y otra esos veinte modelos con los que le grita a las revistas especializadas en moda, a los estilistas nacionales e internacionales que buscan “eso otro” que él está dispuesto a romper todos los esquemas.

9. La romería de J. L. Galán.

Nadie le va a negar que es romero y flamenco, bebe de lo antiguo, le da un extra de volumen y trabaja las mangas. En pasarela hace una colección compacta y, al final, tú te ves en la aldea del Rocío o cualquier otra romería con alguno de sus diseños. Lo ves, es que te ves. Sabéis a lo que me refiero ¿verdad?

Recién llegado a la parrilla de diseñadores y aún con algunos trámites que pasar para dejar de ser novel ahora nos toca esperar para saber si existe ese “más“. Pero por ahora, disfrutemos de lo que nos ha enseñado.

10. La mujer poderosa de Verónica de la Vega.

Es que ella de por sí es eso. Es una mujer poderosa y se lo imprime a sus flamencas. Nadie podrá negar que se trabaja los patrones, los tejidos y los detalles al máximo y dota a la mujer de una fuerza arrasadora no sólo para vestir de flamenca sino también en todos esos otros eventos de los que pueda disfrutar.

Si vas a vestir de Verónica de la Vega tenlo claro, debes ser mujer apta para ser el centro de todas las miradas.

¡Extra! ¡Extra!

11. Encuentra tu nicho de mercado por Juan Boleco

Y sin hacer pasarela. Juan Boleco se ha dado cuenta que hay un nicho de mercado de afolescentes que ni niñas ni mujeres a las que hay que vestir de flamenca y partiendo de su estilo ha trabajado una paleta de color, de un lado pastelosa y de otro, vivos y coloristas, su flamenca.

Aporta un punto diferente para ellas sin ser exhuberantes para su edad ni vestir aniñadas que ya tampoco les pega y ha encontrado así un mercado a explotar que le está funcionando muy bien.

Y hasta aquí esas 10+1 lecciones que nos han dado los diseñadores de moda flamenca este 2022. ¿Y tú? ¿Incluirías alguna más?

Besos por bulerías.