Juan Boleco llena de color, volantes y lunares la Feeric Fashion Week
Pocas veces me veis hablando de otras pasarelas de moda nacionales o internacionales pero creo que la ocasión lo merece. Sí, Juan Boleco, uno de los nuestros, de los que llena de volantes ferias y romerías, de los que inventan patrones de flamenca e invita a llenar de color la aldea del Rocío mientras que en sus desfile no suena ni una sola sevillana ni “flamenquito”, ha vuelto a llenar, por segundo año, de vida y de nuestra moda la Feeric Fashion Week.
No, no es el primero que lo hace, no es el primero que inunda de volantes y lunares una pasarela internacional ni que explota nuestra cultura flamenca a modo de diseños de fiesta.
Pero ¿por qué traerlo hoy al blog? Porque, señoras y señores, ésto también es Moda Flamenca y no coger el cuerpo de un vestido de flamenca, dejarlo entallado hasta las rodillas y ponerle sus mangas pero sin volantes en la falda. Aquello fue cosa de principios de los dos mil. Ya pasó y todo el mundo no es Juana Martín.
Este moderno concepto de moda flamenca que Juan Boleco está llevando más allá de nuestras fronteras, con sello onubense, nos evoca aquellos años en los que esta moda tenía nombre español y no se ocultaba en patrones y diseños que claramente bebían (y beben) de nuestra cultura pero con nombre que aquí se nos hace complicado hasta pronunciar.
El color, los lunares y un perfecto patronaje de Juan Boleco sobre la pasarela de Feeric Fashion Week en Rumanía.
Joven, emprendedor, con las ideas claras, con sello propio, ese que tanto echamos a veces en falta, alguien que no le ha puesto límites ni barreras a su mente creativa y que se esfuerza por llevarla aquí y allá, que carga sus trajes en un coche y que conduce hasta donde haga falta. Ese que hoy recibirá críticas, buenas y malas, pero que, en menos de lo que imaginamos, llenará no sólo otras pasarelas, no sólo las calles de otras ciudades un día cualquiera con un outfit ‘bolequiano’ (sí, aquel concepto que hace unos meses inventé al hablar de su colección ‘Quimérica‘ y que hoy reivindico) sino también más ferias y romerías porque quizás, sólo quizás, haya inventado, colección tras colección, un nuevo concepto de flamenca. Lo queramos ver o no. Sólo el tiempo lo dirá.
No quiero encasillarlo en Moda Flamenca entendida como la moda única y exclusivamente de nuestro traje regional. Quizás deberíamos empezar a hablar de la propia evolución del concepto. O, más bien, de la propia aceptación de dicha evolución.
¿Cuántas veces hemos dicho eso de “si pudiera iría vestida de flamenca cada día“? Pues diseñadores como Juan Boleco nos invitan a ello pero adaptado al asfalto de la ciudad. Y yo, desde aquí, le doy las gracias.
Y repito, ni es el primero que lo hace ni (Dios quiera) será el último pero hoy Juan Boleco es noticia y se merece el reconocimiento a su esfuerzo.