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El final…

Por fin tengo mi ordenador y puedo escribir y poner fotitos!!!

El final de la Feria está aquí. Una semana de diversión para muchos que hoy se acaba cuando las luces del Real se apaguen hasta el año que viene. Pronto empezaran a desmontar la Portada que tanto a dado que hablar que este año, se bailará la última sevillana del año y la primera del siguiente.

Unos se irán a casa cansados y con mucho menos dinero en los bolsillos, otros se irán con algo más de dinerillo a trabajar otras ferias, porque ahora empiezan las distintas ferias de otros pueblos y ciudades.

Ahora hay que lavar los vestido, cuidado que pueden despintar, y dejarlos preparados para la próxima vez. Otras, empezarán a sacar las batas rocieras que ya queda menos para otra juerguecita flamenca o para el sentimiento desbordado que provoca en otros la Virgen del Rociío. Juega y devoción mezclados en una sola aldea.

Las luces del Real se apagarán y habrá que contar los días para ver de nuevo al famoseo por las calles del mismo, hay que contar los días para volver a hacernos trajes de flamenca nuevos, para simof, para la noche del pescaíto o del alumbrado, para bailar, gastar, comer y beber, para ver a amigos que hace tiempo que no vemos, para recordar la feria que fue el año anterior.

Las casetas se cierran, se desmontan como se desvanecen ilusiones, las calles vuelven a atraer a coches en vez de a caballistas y coches de caballo. Todo vuelve a la normalidad. No sonarán las sevillanas y rumbas por el Real ni se pedirá rebujito ni “pescaíto” frito en una barra llena de gente. No surgirán amores ni habrá peleas de Feria.

Se apagan las luces del Real y se apaga mi corazón. Quedan unas horas y la algría desbordada se convertirá en silencio hasta el año que viene.

Espero que hayáis tenido una gran Feria, espero que hayais lucido vuestros trajes con arte y salero, categoría de las manos que los cosen, dulzura de las niñas que en sus primeros años de vida ya corretean por el Real con su trajecito de flamenca y su flor en el pelo…

Espero que la alegría haya desbordado vuestros corazones y que el cansancio no dure muchos días. Mañana, vuelta a la normalidad.

Un beso

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