En color pastel.
Flamenquis…
¡Cuánto nos cuesta a veces vestir de flamenca con tonos pasteles! Y es que es cierto. Llegada cierta edad dejamos atrás los tonos pasteles para las niñas que dejan de serlo, para las mamis que quieren vestir a juego de las peques. Sí, seamos realistas. A mí por ejemplo me cuesta verme a veces vestida tan “pocholita“.
Pero hay que ser realistas. Y es que un rosa, amarillo o celeste bebé puede encajar en un diseño para jovencitas, un diseño de romería o para alguna mujer todopoderosa que quiera arrasar en un feria. Que sí, que no todo es el negro para la noche y el rojo para el día.
Es curioso pero, este año, entre tanta explosión de color, los diseñadores nos han dejado atisbar algunos trajes de flamenca en tonos pasteles, en su inmensa mayoría rosa cuarzo (supongo que por aquello de ser el color del año según el Pantone) Pero yo voy más allá… ¿habrán querido dejarnos entrever alguna tendencia para el año que viene? ¿ensayo, prueba y error o pura casualidad?
Taller de Diseño nos llena de elegancia la pasarela con este vestido en mandarina mientras que Pepa Garrido nos evoca una primavera de ferias pasadas y El Ajolí lo llena de flores y pequeños volantes.
Aguamarina, mandarinas, amarillos bebés, malvas o celestes entre otros además de rosas y nudes. Todos los colores son posibilidades para un nuevo traje de flamenca. Y no sólo de canasteros verde agua de plumeti vive la mujer.
Mientras que la firma El Abanico combinaba encajes y semitransparencias su vestido en aguamarina, Andrew Pocrid llevó al extremo la sensualidad con su diseño ajustado hasta el nacimiento de los volantes. Mientras, Patricia Bazarot nos mostraba que, el negro y el tul, dan mucha fuerza al traje de flamenca.
Sofisticada a la par que dulce, así nos presentaba Antonio Gutiérrez y José Hidalgo a sus flamencas en estos tonos. Combinado con malva o con tonos celestones, el amarillo bebé es una bonita apuesta para vestir de flamenca.
Y como no podía ser de otra forma, la versión rociera de éstos colores también presente en We Love Flamenco y Simof 2016. Desde Atelier Rima, pasando por Consolación Ayala y Mario Gallardo.
No creáis que es mala idea usar colores claros en el camino, de hecho yo os diría desde mi experiencia, que la suciedad se llega a notar hasta menos.
Y llegaron los tonos rosas. Manuela Macías se marcaba un grupo perfecto de trajes de flamenca en tonos pasteles combinados entre sí y jugando con el marfil. Le daba dulzura a diseños llenos de detalles.
Todo ello sin perder de vista trajes como el estampado de Pablo Retamero y Juanjo Bernal jugando con un sencillo corte donde el estampado es el protagonista y el liso de Aurora Gaviño donde se juega con el volumen en las mangas y la caída del tejido.
Y es que al final, un traje de flamenca no es sólo el color. Los tejidos, el diseño, los detalles, todo hacen que ése vestido y no otro sea el adecuado para nosotras, para nuestro tipo de feria o romería, para nuestra edad. Si lo vuestro son colores claros evitad caer en el error de compraros un traje de flamenca de niñas y no de mujer.
En fin flamenquis contadme… ¿os atrevéis con los colores pasteles? ¿os gustan los diseños que hemos visto en la pasarela?
Besitos por bulerías!!!
4 Comentarios
Guacimar
Me han encantado los vestidos del Atelier Rima. Van para el Rocío 17, seguro!
Fina
¿Tonos pastel? ¿Por qué no…?
Son “cucos”, delicados y -según el tono de piel y color del pelo – pueden ser muy favorecedores.
Yo tengo uno rosa bebé y me encanta!!
Ahora me falta un celeste
El Ajolí
Gracias Claudi. Muy chulo el post.
Cloë
Mil gracias Claudia. Pablo & Juanjo