Flamencas de verano 2015.

Flamenquis…

Sí, ha llegado el verano pero no por ello dejan de celebrarse ferias y romerías. Es entonces cuando las dudas de muchas chicas asaltan la cabeza. Si ya es toda una apuesta vestirse de flamenca en primavera (unas veces llueve, otras hace calor), en verano una no sabe si vestirse o no de flamenca.

“Uy… mangas largas no que dan mucha calor” “Los trajes de flamenca cortos que si no empiezo a sudar y me agobio” “Muy estrecho el traje no que cuánto más pegado sudo más y estoy incómoda”. Éstas y otras son las frases normales de toda mujer que busca un traje de flamenca en estas fechas. Tranquilas. Agobios cero, que vestirse de flamenca es de las cosas más bonitas de este mundo.

Eso sí, nos pongamos como nos pongamos un traje de flamenca SIEMPRE dará calor.

No estamos en bikini en la playa remojándonos en el mar. Estamos recompuestas, entaconadas con un traje (por lo general) largo, ceñido al cuerpo, muchas con mantoncillo y maquilladas más de lo habitual, algunas con una mascarilla más densa que la propia capa de ozono. Otras se atreven hasta con las medias o culotes para no rozarse los muslos. Bailamos, vamos de romería andando unos cuantos de kilómetros o de una caseta a otra y, estemos donde estemos, han subido las temperaturas como lógica aplastante de esta nueva estación. Con todo eso y algunas cosas más ¿en serio pensáis que las mangas son las culpables de la calor que pasamos vestidas de flamenca? ¡A la hoguera las mangas! 

Pues no, no son las culpables, pobrecillas. 

¿Existen soluciones? Existen más bien “atajos”. Ante las mamarrachadas (sí, mamarrachas en toda regla, disfraces que no hay quien los entiendan y que no pueden denominarse “traje de flamenca“) mejor no vestirse de flamenca. Vestidito mono, cuñas y al lío. Ahora bien, si sois de las que se viste sí o sí de flamenca, vamos a hacerlo bien.

Quizás, teniendo en cuenta, alguno o todos, estos tips podamos dejar a un lado tanto sofoco y pensar más en divertirnos.

LAS TELAS.

Quizás de las cosas que más ayuda a sofocar esta calor flamenca es la elección de la tela. Un popelin, telas brocadas, jaquards, perforados… puede que no sea la mejor opción para estas fechas.  

En cambio, las gasas, algodones, linos, crespones y cualquier tejido vaporoso nos va a ayudar bastante. Eso sí, por lo general, estos tejidos suelen utilizarse para trajes de flamenca caídos aunque siempre hay quien sabe bien cómo levantar esos volantes.

LAS MANGAS.

¿Qué usar trajes de flamenca sin mangas ayuda? Está claro que sí, pero, tal y como hablamos en el post sobre mangas de flamenca para este 2015, hay más opciones. Por ejemplo, ¿alguien puede decirme cuánta calor de una manga de tul o encaje? 

EL CORTE DEL VESTIDO.

¿Qué no? Lo hemos dicho antes. Parece que cuanto más estrecho más calor pero, por ejemplo, un corte evasé es una gran opción. Otra cosa que podéis hacer es comprar una bonita falda y utilizar una camisa o top de encaje más veraniega, con pequeños claveles por manga o con un volante al escote. Además, cambiando la camisa hacéis, de un mismo traje de flamenca, dos. Ideas muchas.

Y si lo vuestro es marcar figura siempre podéis obviar este punto y apostar por telas y mangas más aptos para estas fechas.

COMPLEMENTOS.

No me miréis con cara rara. Está claro que prescindir del mantón es una ayuda incorporada pero, si sois fieles a él, haced igual que con el traje de flamenca: buscad un mantoncillo confeccionado un tejido ligero. No es lo mismo echarse al cuello un crespón, que una gasa, que un encaje.

En fin flamenquis… imaginación y creatividad al poder y, siempre que os pongáis en manos de un diseñador, escuchadlos y valorar sus consejos que ellos, en esto de la costura, tienen mucho que decir.

Besitos por bulerías!!!